Cazador

Cazador

El cazador de sueños acechaba paciente a un sueño pequeño (del tamaño de un conejito). El sueño atisbaba nervioso, presintiendo el peligro. El cazador apuntó su arma y disparó: el sueño cayó víctima de una parálisis mortal. El cazador lo ató y se preguntó cuánto pagarían por el sueño en el mercado negro. Se lo puso a cuestas y salió de la mente de la pequeña niña.Imagen